Lisboa y su luz



Plaza del Comercio (foto: Lee Cannon)

Lisboa, a orillas del Tajo, es un cercano balcón al Atlántico, una ciudad con una luz única y con una idiosincrasia europea, a la par que singular. Hoy nos damos un salto a la capital de Portugal.

Comenzamos nuestro recorrido en el centro de Lisboa, la Plaza del Comercio. A través de su precioso arco de piedra accedemos a la Rua Augusta, la calle principal de la Baixa. En esta vía y en sus aledaños se concentra un buen número de comercios de todo tipo: artesanía y antigüedades muy típicas del país, vinos de la tierra o modernas tiendas de moda. Abundan además los vendedores ambulantes.

Allí encontraremos el Elevador de Santa Justa, un ascensor que servía para comunicar la Baixa  con el Barrio Alto. Actualmente cumple las funciones de atracción turística, desde donde se aprecian unas hermosas vistas desde lo alto.

El otro extremo de la Rua Augusta lo delimita la Plaza del Rossio. Se trata de uno de los lugares de encuentro habituales de los lugareños, por ello siempre hay mucho movimiento. Desde allí y subiendo una pronunciada cuesta arriba podemos acceder al Barrio Alto, una zona de estrechas callejuelas llena de bares y restaurantes que por las noches se abarrota de gente. Imprescindible visitar alguna noche el barrio Alto para embriagarnos del típico ambiente nocturno lisboeta.

Puente 25 de Abril (foto: Da Beez)

Otros lugares de interés son el barrio de Alfama, de pequeñas calles y pintoresca arquitectura, junto al que se encuentra el Castillo de San Jorge y la Catedral y también, aunque ya lejos del centro está Belém, otra zona de interés turístico donde destacamos el Monasterio dos Jerónimos o la Torre de Belem. Si vas por allí no dejes de probar los sabrosísimos Pasteles de Belem, ¡te encantarán!  Además se trata de un delicioso souvenir que tus familiares o amigos te agradecerán enormemente.

Lisboa suele tener buen clima en primavera y si la suerte nos acompaña podemos disfrutar de algunos días de playa. Para ello recomendamos especialmente las de Costa de Caparica, al sur de la ciudad. Podemos llegar cruzando el Tajo por el famoso puente 25 de Abril o a bordo de uno de los ferris que cruzan el rio desde distintos puntos.

El verano se acerca, ¿por qué no ir haciendo planes?. Aprovecha y déjate iluminar por la espléndida luz de la ciudad del Tajo.